Este verano, y como nos vamos de vacaciones hasta el 23, queremos que este tema nos sirva de reflexión por su importancia en los resultados económicos a medio y largo plazo de un país. Fuera de connotaciones políticas, va siendo hora de que seamos maduros, de que la economía prime sobre la política y de que impere el sentido común para que, lo que todos los demás países ven desde fuera, no pase inadvertido para nosotros y sepamos aprovechar el “empujón” que la selección española ha dado a nuestra Marca.
The Times lo ha definido muy bien en uno de sus artículos: “El Mundial o el triunfo para unir una nación”. Una reflexión en la que explica cómo la victoria de la selección en el Mundial de África no se limita a un país orgulloso por el éxito futbolístico. Recalca que la Copa del Mundo llega a un país asfixiado por constantes informes negativos procedentes de instituciones financieras internacionales y estadísticas amenazantes que sugieren que la crisis está lejos de llegar a su fin.
Todo ello, en un clima político complicado por la coyuntura económica y un cada vez mayor desánimo general entre el ciudadano medio. Sin embargo, el triunfo de la selección ha dejado “un país más feliz” y “más cerca de la cohesión nacional” de lo que nadie puede recordar. Un efecto que todavía se deja notar y que debería hacer reflexionar a todos nuestros políticos, sin excepción.