MERCEDES MARCOS- Cuando hace casi siete años, César Pascual y sus tres socios decidieron emprender, casi cualquiera se hubiera preguntado si es que iban a la contra del mundo. Ellos, jóvenes del centro de España, que habían logrado, pese a la crisis, sendos trabajos en San Francisco en una agencia de publicidad. Ellos, que habían cumplido un sueño americano en plena California. Ellos, que de lo que más sabían era de marketing, llamaron a sus casas para decir que se volvían con todos sus bártulos a fabricar cerveza artesana.
De aquella locura, que ahora es un sólido proyecto empresarial, nació Cervezas La Virgen. Pascual explica que durante su estancia en la ciudad de los tranvías, donde la cultura cervecera se vive con fervor, él y sus socios se imbuyeron de una creciente tendencia del momento que reclamaba la vuelta a los oficios artesanos. “En medio de una ciudad como San Francisco, tan tecnológica y madre de las startups, nos apetecía meternos en un negocio de este tipo en el que a la larga pudiésemos exportar la gran variedad de tipos de cerveza que existen“, explica.
Comenzaron a gestar el proyecto con muchos conocimientos de marketing, pero muy pocos de cerveza. Clic para tuitear
La madrileña ciudad de Las Rozas, lugar de origen de tres de los socios, fue la elegida como centro de operaciones. Allí instalaron la fábrica y comenzaron a gestar el proyecto con muchos conocimientos de marketing, pero muy pocos de cerveza, “sabíamos de lo que habíamos bebido”, comenta el cofundador.
Por eso decidieron que Jaime Riesgo, actual director de Producción, se formara como Maestro cervecero tanto en San Francisco, como Alemania y España. “El cómo vender un producto, cómo lanzar una marca, ya lo teníamos”, afirma Pascual.
Y por eso, desde el inicio, el concepto fue muy claro: elaborar una cerveza artesana, pero que no amargara al paladar de los recién iniciados en ese mundo para que se atrevieran a consumir más variedades y con más potencia en el futuro. De ese brief nació Madrid Lager, la primera del rosario que ya acumula cerveza La Virgen. La que fue concebida como una cerveza pura, “sin pecado” y “virgen”, por estar elaborada sin aditivos: solo agua, levadura y lúpulo de cebada.
Ahora ya comercializan cuatro cervezas anuales, una versión sin gluten de la Madrid Lager, además de dos estacionales y otras tantas especiales, como la Carajillo Stout o la Buena Esperanza. “Concretamente ahora hemos lanzado para Navidad la cerveza de Castañas Asadas al Fuego y peladas a mano, que es un buen maridaje con las carnes de esta época“, expone el director de Marketing.
Concepto muy claro: elaborar una cerveza artesana, que no amargara al paladar de los recién iniciados en ese mundo. Clic para tuitear
Para los fundadores de La Virgen, en un país tan cervecero como España, era muy importante transmitir el concepto de que no existe solo un estilo de cerveza y que además no todas están hechas para el mismo momento de consumo. “Queremos formar a la gente para que sepa que hay un mundo enorme por descubrir y se lo mostramos en un orden determinado“.
Es por esta razón por la que cuando lanzaron la Madrid Lager quisieron que fuese una artesana, con todo lo que ello conlleva, pero de sabor suave, y poco a poco han ido incrementando la potencia. “Imagínate, si no estás acostumbrado a la cerveza negra, que te den de primeras una de ocho grados, súper torrefacta. Por eso, en la cultura cervecera tiene que existir un aprendizaje como el que se hizo con el vino, y parte de nuestro trabajo es ese“.
Esa “experiencia cervecera” se puede vivir en primera persona en la fábrica de La Virgen en Las Rozas. Pascual relata que es allí donde uno puede degustar la cerveza y sentir verdaderamente su autenticidad. “Tenemos un espacio donde de martes a domingo, se puede comer y beber en la fábrica, pero no es un bar. Es precisamente el concepto genuino de tomar cerveza artesana en su propia fábrica, con el olor a lúpulo alrededor, el sonido de la embotelladora…“.
No todas las cervezas están hechas para el mismo momento de consumo. Clic para tuitear
Sus retos pasan ahora por seguir cultivando la cultura de la cerveza entre el público y también formar parte de los principales lineales de los supermercados del país, porque aunque esta cerveza sea muy madrileña, “la idea es convertirnos en la cerveza artesana de referencia”.
Sus retos son seguir cultivando la cultura de la cerveza y formar parte de los principales lineales de los supermercados. Clic para tuitear
Cuentan en el entorno de la empresa, que sus fans más foodies podrán disfrutar en Madrid a partir del año que viene de distintos bares La Virgen, cada uno con una estética y carta diferente, en función del barrio en el que se sitúen. Por el momento, podremos degustar un trago de estas rubias sin pecado en el Callejón de la Virgen, ubicado en la calle Acuerdo, 3 y La Fuente de la Virgen, en Calle de la Sobrerería.