El Elevator Pitch o factor diferencial de una empresa comprende todas aquellas virtudes y logros que las diferencian de la competencia. Mantenerlas a lo largo del tiempo se convierte en su principal argumento para liderar el mercado. Apostar por una estrategia de diferenciación parece que les ha funcionado a grandes compañías, aquello en lo que son realmente buenas.
La clave para muchas de estas compañías es detectar que es lo que de verdad las diferencia del resto y trasladar este modelo hasta el último rincón de su empresa, adaptando las innovaciones a la cultura y características de la compañía. Cuando se llega a un nuevo mercado o se lanza un nuevo producto, la estrategia debe regirse siguiendo el modelo de la compañía.
Kodak, Nokia o Reebok son buenos ejemplos de grandes fórmulas que no han sabido adaptarse a los tiempos suficientemente rápido. Las grandes empresas operan mientras el resto sigue pensando qué hacer. Siguiendo esta máxima, veamos algunos ejemplos de estrategias de diferenciación:
IKEA
Destaca por sus muebles de diseño a bajo precio. Su modelo de producción y distribución se centra en reducir costes para ofrecer precios muy competitivos.
APPLE
La palabra que define su éxito es “culto”. Los clientes sienten devoción por sus productos y quieren tenerlos, ser parte del “mundo” de la manzana.
COCA-COLA
La clave es su modelo de distribución. Donde hay una persona con sed, siempre hay cerca algún lugar donde comprar una Coca Cola.
Más allá de su tecnología e innovación, su modelo comercial es claro y simple. Si pagas, apareces el primero en millones de búsquedas.
AMERICAN EXPRESS
Sus tarjetas son parecidas al resto, pero han creado un sentimiento de pertenencia a un club en el que hay otras muchas ventajas.
NIKE
Su marca y sus diseños han sido importantes, pero también la forma en la que la marca está siempre al lado de los deportistas más importantes del mundo.
P&G
Estudia a sus clientes y lanza continuas innovaciones en sus productos para conseguir que el consumidor siga pagando por ellos aunque sean más caros.
TOYOTA
Su punto fuerte es su gran control de calidad. Sus coches tienen menos averías que el resto y eso hace que se vendan más.