Hoy os traemos una noticia que sin duda avala lo que venimos diciendo desde hace ya unos meses. La economía española vuelve a resurgir, los síntomas de una clara recuperación son cada vez más visibles, a pesar de los mensajes tan pesimistas y preocupantes que oímos en los medios de comunicación.
España vuelve a situarse entre los 10 fabricantes de automóviles del mundo. Concretamente se sitúa en el noveno puesto, frente al puesto 12 que tenía a finales del 2013, superando a Canadá, Rusia, Francia y Tailandia.
El año que viene se estima que se fabriquen un 8% más que este año. Además, existen los programas de subvención a la adquisición de vehículos como el plan PIVE o el plan PIMA Aire que mejoran el consumo de automóviles en el mercado español, impulsando así la demanda.
Sin embargo, este impulso al consumo debe de ir acompañado con un incremento en la competitividad tanto del sector automovilístico, como de la economía en su conjunto. Si España no es competitiva y no produce buenos bienes y servicios de poco nos servirá estimular el consumo. La clave está en la competitividad, y para ser más competitivo hace falta trabajar con una filosofía de Marketing Estratégico, donde lo primordial es analizar y planificar antes de pasar a la acción.