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8 de cada 10 marcas afirman querer incrementar el presupuesto para el influencer marketing.
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Se prevé que en 2022 el gasto en estas campañas aumente un 68%
Han pasado dos años desde los primeros confinamientos por el coronavirus, un suceso que aumentó considerablemente la actividad publicitaria a través de los influencers y desencadenó nuevas formas para conectar con los clientes. El marketing de influencer está de moda, y el pasado 2021 volvió a aumentar en un 50 %.
El modelo de publicidad asociado a los influencers es una herramienta prioritaria para muchas marcas, convirtiendo a estos líderes de opinión en un reclamo esencial para generar proximidad y confianza entre sus audiencias.
Según un estudio de Samy Alliance, la inversión de las compañías en el influencer marketing aumentó un 50 % durante el pasado año. Afirmando, a su vez, que 8 de cada 10 marcas han manifestado el interés en seguir aumentando el presupuesto para realizar estas campañas.
Se prevé que en 2022 el gasto de las marcas siga aumentando en un 68%, convirtiéndose paulatinamente en el TOP 3 de los principales canales para publicitarse.
Las grandes marcas tienen que gestionar anualmente más de 200 millones de menciones en redes, recogiendo información detallada de sus públicos. Detectando nuevos intereses, tendencias y hábitos de consumo.
Esta información es imprescindible para establecer el perfil de sus clientes que permitirá encontrar qué influencers se asemejan a sus gustos y para poder elaborar una campaña coherente con la filosofía de marca.
“Los consumidores han evolucionado, la segmentación ya no es simplemente por edad o género, son que se tiende a agrupar audiencias afines por gustos e intereses”, “los nuevos consumidores ya no se creen la publicidad de las marcas, sino que buscan compatibilidad con estas”, aseguraba Marta Nicolás, Cofundadora y CEO de Samy Alliance.
No es ningún secreto en el mundo del marketing que las recomendaciones de personas de confianza aseguran cualquier venta. Tanto es así que el 61 % de los consumidores compran impulsados por una recomendación familiar, amigo o influencer en las redes sociales.
No todos los usuarios están familiarizados con las redes sociales.
La generación Z comprende a aquellas personas que nacieron a finales de los 90 y principios de los 2000, denominados centenials. Estos jóvenes y adolescentes son nativos digitales, lo que les aporta un gran manejo y facilidad en el uso de cualquier plataforma digital, incluyendo las redes sociales. Por tanto, la generación Z es el foco para estas comunicaciones a través de campañas de influencers.
Tik Tok es la plataforma por excelencia para generar engagement y conectar con las audiencias. Tal y como afirma el informe de Samy Alliannce, la sociedad estadounidense ha invertido más de 24.000 millones de horas en el visionado multimedia, y donde cobra mucho más protagonismo el contenido.
Por otro lado, el 76% de los usuarios de Twitch manifiesta mostrar aprecio por las marcas que anuncian sus streamers habituales.
Instagram, sin embargo, es la red social favorita para comprar, por delante de las anteriormente mencionadas. Denotando el live shopping como experiencia de marketing 360º definitiva para relacionarse con los consumidores.
