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Meta se enfrenta a una multa millonaria, única en la historia, por el mal uso de los datos de sus clientes
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Perdidas económicas y de personal, ¿es el comienzo del fin de Meta?
El año solo acaba de comenzar y ya Meta, la empresa anteriormente conocida como Facebook y, actualmente dueña de Instagram y WhatsApp, no ha empezado con buenas noticias. ¿La razón? Ha sido sancionada con una multa de 390 millones por parte de la Unión Europea.
La empresa, tras anunciar a finales de año que iban a despedir el 13% de su plantilla, concretamente a más de 11.000 empleados, por el fracaso que había tenido la inversión que realizaron en el metaverso. Meta, finalizó el 2022 con malas noticias. Sin embargo, la noticia que ha recibido esta semana ha empeorado aún más la situación de la empresa de Mark Zuckerberg.
Dado que la empresa tiene su sede europea en Irlanda, la Comisión Irlandesa de Protección de Datos (CPD), ha sido la encargada de investigar si ha cometido un delito o no. Después de una gran investigación, la comisión ha concluido con que Meta ha infringido las normas de la Unión Europea sobre la protección de datos según la reforma que se llevó a cabo en 2018 de la ley de Datos.
Esta sentencia afirma que la forma que Meta tenía de pedir permiso para utilizar los datos de sus clientes con fines publicitarios era ilegal. Puesto que, ninguna empresa puede forzar a sus consumidores a aceptar publicidad personalizada que se ha generado por el uso sin permiso de sus datos.
De este modo, la comisión concluye con que deberían haber preguntado sus clientes explícitamente si querían que sus datos se usasen o no. A pesar de ello, Meta ha comunicado que piensa apelar la sentencia, puesto que no están de acuerdo con ella.
El problema al que Meta se enfrenta no es solo económico, también afecta a su estructura, ya que una de sus fuentes de financiación es el dinero que ellos ganan por anunciar a ciertas marcas o servicios en sus diferentes aplicaciones.
El fruto de este caso ha sido la demanda interpuesta por el abogado Max Schrems, conocido por haber ganado casos parecidos a este. Aunque esta multa es la más grande que alguna vez se ha puesto a una empresa por la utilización indebida de la protección de datos de sus clientes.
El propio Shrems ha explicado la razón de su demanda de la siguiente manera: “Nuestra infraestructura digital tiene que estar regulada para que haya normas que los profesionales se encarguen de hacer cumplir para que el usuario medio pueda abrir su teléfono y no tenga que preocuparse”.
Sin duda, esta demanda se va a convertir en histórica, ya que ha conseguido que todos podamos usar nuestros móviles de una forma mucho más seguro, pero que le va a suponer a Meta tener muchas perdidas.
